martes, 15 de octubre de 2013

El adiós a un grande

Todo parece indicar que hoy se despide de la selección un grande. Se va el jugador peruano más exitoso de los últimos tiempos, Claudio Pizarro. Querido por muchos y criticado por algunos, que definitivamente se encuentran muy lejos de entender lo que es jugar al fútbol. Es muy fácil crucificar a un jugador cuando falla un penal, o cuando no mete goles. Lo difícil es darse cuenta del peso que tiene Claudio en la selección, de seguirlo jugada a jugada y entender que sin él, Perú no sería Perú.

Hoy se retira de la selección “el diferente”, y le toca irse de una manera poco honrosa para cualquier jugador de su nivel. Se va jugando en un estadio sin público. Todo por culpa de un par de hinchas que entienden que para hacer respetar la casa hay que ser más vivo que el rival y actuar de forma violenta, impartiendo justicia por sus propias manos. En un país donde estos sujetos son vistos como héroes, las consecuencias las pagan figuras como Pizarro, que van a tener que terminar su ciclo en la selección, sin la presencia de esa hinchada que es consciente de su grandeza.

En un partido donde ya no hay nada en juego, están todos los años de experiencia y los sueños de un jugador que puso todo para que su selección vaya al Mundial. El bombardero, ese que desde que lo llamaron para formar el once titular, no se amilanó ante ningún rival y siempre creyó en su capacidad y en la de sus compañeros para clasificarnos a una Copa del Mundo. El que siempre estuvo ahí para apoyar al equipo, para putearlos cuando hacían las cosas mal y para felicitarlos cuando lo dejaban todo en la cancha.

Claudio siempre estuvo abierto a escuchar las críticas, nunca bajó los brazos en ningún partido. Cuando tuvo a todo un estadio repudiándolo por fallarse un gol, mantuvo la calma y la serenidad que muy pocos jugadores logran. Ama el fútbol y sabe que este deporte implica disciplina. Siempre fue el primero en llegar a los entrenamientos y el último en irse. Entendió que para ser bueno hay que dejar de lado muchas cosas y sacrificar muchas otras.


Hoy no se va de la selección un futbolista cualquiera. Se va el capitán, líder del equipo. El que corrió todo. El que siempre salió jugando. El que jaló marca ante todos los rivales. El que nos inyectó las ganas de seguir creyendo en la selección. El que ganó todo con su equipo. El que juega con la cabeza y se anticipa a las jugadas. El único que entendió que hace falta ser inteligente para jugar al fútbol. El ídolo de muchas personas alrededor del mundo. El que es exitoso dentro y fuera de la cancha. El más grande, Claudio Pizarro.

Fuente: Diario La República

Johana Cubillas

sábado, 7 de septiembre de 2013

El amor llega cuando tiene que llegar, y los mundiales también

Luego de la derrota de Perú ante la selección de Uruguay, me queda un sabor amargo, no porque no considere que los peruanos no tuvieron la actitud adecuada en la cancha, sino porque todavía no entienden que para jugar al fútbol hay que ser inteligentes. Con esto no me refiero a que los jugadores tienen que ser brillantes en matemáticas, o que hay que traer más abogados o ingenieros a la selección; me refiero a que un futbolista tiene que estar en capacidad de entender y leer un partido.

Un buen futbolista tiene que tener inteligencia emocional para no volverse loco cuando comete, o le cometen una falta. Tiene que saber en qué lugares de la cancha no puede cometer errores y tiene que tener claro el peso y el estilo de juego de cada uno de los integrantes del equipo rival. Tiene que dar el pase en el momento adecuado y tiene que saber cuándo jugar hacia atrás. Tiene que ser consciente de sus limitaciones y “ratonear” cuando sea necesario. Tiene que aprovechar sus individualidades y encarar con las mismas. Tiene que saber que en la selección no nos sobra… nos falta, por lo tanto, no puedes dejar que te saquen una tarjeta roja, cuando eres el único jugador que cubre bien su puesto.

 El fútbol es más que un deporte, es el reflejo de la sociedad, es por esto que al decir que falta inteligencia individual y colectiva, me refiero a que falta educación, la misma que falta en todo el país. Es un deporte que no requiere solo de entrenamiento físico, sino también psicológico y emocional. Para formar a un jugador tienes que hacerlo en forma integral; se tienen que cubrir todos los aspectos que requiere un deportista para triunfar en su rubro.

El peruano ganó actitud e identidad desde que entró Markarian, pero ese es sólo uno de los componentes, quedan otros dos que tenemos que seguir fortaleciendo. El orden táctico y la lectura de los partidos, como ya mencioné antes, son vitales para afrontar encuentros ante equipos que, de por sí, están acostumbrados a ir a los mundiales. A los peruanos les falta esa sensibilidad con el balón, y también es cierto que, aunque físicamente muchos están mejorando, esto se lo deben al buen nivel de sus clubes en Europa.

Es fácil terminar un partido y echarle toda la culpa al árbitro, a los peruanos nos encanta tapar los errores de nuestra selección, vivimos el fútbol desde una perspectiva amorosa, como cuando en una relación, a pesar de saber que la otra persona está haciéndolo todo mal, tratamos de tapar las cosas porque nos gusta seguir sufriendo. Somos bastante masoquistas en ese sentido, nos damos por vencidos antes de que inicien los partidos, tenemos barras de “sí se puede”, cuando eso debería estar implícito. Parece que inconscientemente y aunque nos duela, sabemos de las limitaciones que tenemos, y que por las mismas no vamos a ir al mundial, por lo menos no hasta que las cosas cambien.


En un país donde el fútbol está manejado por personas que no aman este deporte, no se le puede pedir más a sus jugadores. Para llegar a ser los mejores tenemos que empezar desde abajo, no solo para clasificar a un mundial, sino para dar batalla en el mismo. Hay que invertir en educar a los futbolistas, en darles todo lo necesario para que sean los mejores, no los cuartos, ni los segundos, tenemos que ser siempre los primeros, y hay que trabajar mucho para eso. El amor llega cuando tiene que llegar, y los mundiales también.

domingo, 30 de junio de 2013

Entrevista a Jaime Pulgar-Vidal

Entrevista al historiador, periodista y profesor Jaime Pulgar-Vidal, quien escribe en la página web de CMD, en su propio blog el cual por título su nombre y es, además, un amante del uso de las redes sociales, Facebook y Twitter, por donde sus seguidores nos enteramos de su opinión a cerca de las últimas noticias, tanto deportivas como culturales.

¿Qué tan importante es el uso de internet para transmitir información en la actualidad?
- Es sumamente importante porque, adicionalmente a que puedes transmitir información de manera inmediata, no necesitas imprimir, ni editar. Además, internet te permite interactuar, quien te lee puede darte una respuesta, ya sea en una red social, en un blog o en una página de internet, siempre hay un espacio para los comentarios. Lo negativo del asunto es que no sabemos si estamos preparados para interactuar, porque lamentablemente, en la mayoría de los comentarios, sobretodo en los dedicados a las páginas de fútbol, lo único que se leen en los comentarios son insultos. Ese es un problema que creo deberíamos analizar los periodistas para saber qué tanto deberíamos interactuar en internet.

¿Qué tan complicado fue el paso del uso de los medios tradicionales a hacer uso de las plataformas digitales?
- Fue muy complicado porque los medios tradicionales siempre pensaron que había una idea de primicia, ahora el asunto es tener que dar a conocer esa noticia en un medio en el que la noticia la va a ver todo el mundo, incluyendo tu competencia y en caso esta tenga mayor alcanze, la primicia pasaría a ser del otro y no tuya. Cuando yo trabajé en números ceros de un periódico, yo hacía la página deportiva y sacaba la información de las páginas web, que sabíamos que eran las que más se actualizaban y simplemente le dábamos vuelta a la noticia y las noticias que brindábamos pasaban como frescas, como si fueran nuestras. Lo que está cambiando es que ahora los medios de comunicación suelen citar a las fuentes, lo cual es básico.

¿Es importante el uso de redes sociales como Facebook y Twitter para los periodistas?
- Es muy importante. No tanto para dar a conocer noticias, porque esto muchas veces genera problemas con los medios de comunicación para los cuales uno trabaja, es mejor usarlas para dar tu opinión sobre un tema en concreto. Uno da a conocer su opinión en la red social, que probablemente no comparta el medio para el cual trabajas, pero no importa porque finalmente es tu punto de vista. Creo que las redes sociales son importantes para que la gente sepa qué es lo que uno piensa referente a las noticias en general y así diferenciarte como periodista.

¿Cualés son las mayores ventajas y desventajas que trae el uso de internet?
- Creo que la mayor ventaja es la posibilidad de interacción. La mayor desventaja, a veces, es que aún tendemos a creer que los medios tradicionales son los más importantes, escribimos buenas notas para estos medios y escribimos notas muy pobres para las propuestas digitales. Muchos de los periodistas aún no entienden o no creen en la fuerza y la popularidad de internet.

¿Qué prefiere, los medios tradicionales o los digitales?
- Para mi son complementarios. Lo que hago es leer "El Comercio" en las mañanas y en las tardes leo las noticias por las páginas web de los diarios más importantes. Yo creo que el hecho de seguir comprando medios escritos es una cuestión cultural, mi padre me enseñó eso desde chico y probablemente es por esto que lo sigo haciendo.

martes, 23 de abril de 2013

Debate entre íntimos: ¿Bombardero o Depredador?

En caso tenga que elegir entre Paolo Guerrero y Claudio Pizarro para que uno forme parte del museo de la fama del fútbol peruano, yo elegiría  sin dudarlo, al primero. Mis argumentos para tomar esta decisión se basan en factores económicos, culturales y en el desempeño de cada uno en la selección

En cuanto al aspecto económico, considero que la imagen de Paolo Guerrero como personaje público y deportista calificado es más rentable, paga más, que la de Pizarro. Para sustentar este argumento haré referencia a las diversas campañas de publicidad de grandes marcas como Oreo y Pharmaton, que usan al nueve de la selección peruana como imagen principal de sus campañas para promover la venta de sus productos. Sabemos que las empresas buscan el enriquecimiento de sus accionistas como objetivo fundamental, para lo cual se invierten millones de dólares en estrategias de marketing y en estudios de mercado que hagan esto posible. Según esta búsqueda hecha por las diferentes organizaciones que hay en nuestro medio, encontramos que es Paolo quien vende más en estos momentos.

Por otro lado, existe un tema cultural que es fundamental en esta decisión. Vivimos en un país sentimentalista, donde el hincha se involucra mucho con sus ídolos. Considero que los peruanos se sienten más identificados con la historia de Guerrero que con la de Pizarro. Esto tiene que ver con la forma en la que vivió cada uno antes de ser las estrellas que son ahora. Mientras Claudio siempre va a ser visto como el "blanquito" de buena familia, Paolo es el "peruano luchador" que salió de una familia humilde y luchó hasta conseguir sus sueños. La vida "se la puso" más fácil al primero que al segundo, o por lo menos es eso lo que el público percibe.

Queda entonces hablar del aspecto futbolístico, concretamente, de la selección. Si bien es cierto, tanto Guerrero como Pizarro son jugadores que han logrado premios importantes con sus clubes a lo largo del tiempo y son cracks en donde jueguen, parece ser que el segundo está en falta con el país. Estamos en una sociedad donde el hincha valora mucho el gol, no se acepta a un delantero que no anote, por más talentoso que este sea. Es por este motivo que Paolo, al marcar tantos goles con la blaquirroja, esta varios peldaños arriba que Claudio, quien tiene mucho tiempo sin anotar con la selección (de más está mencionar los goles que se falla constantemente).

Luego de haber mencionado mis argumentos líneas arriba, queda claro por qué elegí a Paolo Guerrero y no a Claudio Pizarro. Guerrero sería la mejor opción, si se pretende dedicarle un espacio a un jugador actual, en un museo del fútbol peruano. Finalmente lo que se busca es una opción rentable, que se identifique con la sociedad y que cuente con el talento necesario para ser digno de ocupar ese lugar. Estoy segura de que el delantero del Corinthians cumple con todos esos requisitos y más. Y tú qué opinas?

Izquierda: Paolo Guerrero / Derecha: Claudio Pizarro


domingo, 14 de abril de 2013

La figura de la cancha se llama Yordy Reyna

Yordy Reyna. Fuente: Depor
Claro ejemplo de que el talento viene en frasco chico. Un jugador que siempre define de cara al gol, que no le teme a los arqueros y que sortea a los defensas como él solo. No solo anota como los grandes, es un delantero potente, que jala marca y es rapidísimo en la cancha. Alianza Lima tiene la suerte de tenerlo en su plantel, es para muchos titular indiscutible. Sí, estamos hablando de Yordy Reyna.

En los últimos tiempos, encontrar un delantero con todas estas características es lo que necesita el fútbol peruano. Se compara mucho a Yordy con Jefferson Farfàn, pero este tiene algo que deja la sensación de que puede ser más que el segundo. Esa sensación de que no le queda grande ningún rival y que siempre sale a sacar cara por su equipo, y como lo demostró hace poco, por su selección. Él sabe que hace las cosas bien dentro de la cancha, disfruta el fútbol y se nota; es por esto que deja al hincha con la seguridad de que se tiene confianza.

Yordy es muy joven, pero actúa en la cancha como si tuviera la experiencia de los jugadores mas grandes. Si bien es cierto, faltan pulir bastantes aspectos, pero por lo general es un jugador completo. Cumple con su labor de delantero y asume mas responsabilidades. No solo hace goles, también aporta quitando la pelota, metiendo centros, haciendo pases de gol y complicando en el juego al rival.

Parece que estamos frente a un jugador que se candidatea como futuro ídolo se muchos. Tiene todo para ser igual o más grande que aquellos jugadores de los setenta que los hinchas no dejan de recordar. Un jugador con toda la actitud necesaria para llevar su carrera a las ligas más importantes. Le tocará hacer las cosas correctamente y no alocarse con lo que se le viene, que seguro es algo grande. El equipo que logre sacar todo su potencial se estará ganando con uno de los mejores jugadores que ha sacado el Perú en mucho tiempo, y esa es una oportunidad que seguro Reyna sabrá aprovechar.